EL SORTILEGIO DE LA FLOR

El paisaje era inmenso, cual desierto en mediodía
Yo no podía respirar, y: aquí sufría mil tormentos
Me ahogaba por instantes, y un pulmón me dolía
Mis ojos desorbitados. [De mis cuencas se salían]
Allí el suelo no lo pisaba, aquí parecía que flotara
Y sufría los mil tormentos, y me dolía el alma mía

Vi un cielo color morado… Intenso como las uvas
En el no existían luceros, tampoco tenía una luna
Ese lienzo desprovisto, de estrellas tenía ninguna
Me ahogaba é iba muriendo, lleno de mil agonías
En ese planeta inhóspito, no era noche ni era día
Pero yo tenía un propósito. De salvar al alma mía

Cuanto añore mi planeta.. Cuanto recé al Creador
Quería cumplir la misión, lo pedí con toda el alma
Esa palabra profeta, y me hizo el milagro el señor
El duende allí me miraba, y abierta tenía la mano
Vi la estrella en su palma, y me dijo ven a tocarla
Y aquí podrás respirar y ¡estarás tan puro y sano!

Hoy camino con el duende.. Voy a buscar esa flor
El entendió mi dolor. y dijo: del amor se aprende
No hay sacrificio imposible, si tú amas de corazón
Sé que ella duerme en la tierra y espera salvación
La flor la resucitara… [Si este amor es de verdad] 
En ella existe el sortilegio y ella salvara a tu amor

Flotábamos en el suelo y la niebla cubría mis pies
Mírala allí: dijo el duende, debes tener alma pura
Tan solo puede cortarse, en dos mil años una vez
Lentamente me acerque.. y la mire obsesionado
Ella tenía el sortilegio, ese que salvaría a mi amor
La tome delicadamente y [allí yo corte esa FLOR]

Fue momento de emoción, y: todo giro alrededor
Me envolvió aquel espiral. y fui bajando, cayendo
Y vencí los espacios, y llegue al lecho de mi amor
Nervioso tome la flor y La coloque en su corazón
Esta se fue diluyendo y [su fragancia la envolvió]
Y ella se fue despertando y dijo: te amo mi amor

Autor: Antonio Hernández Gutiérrez
Fecha: 24 de febrero de 2014
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País Colombia